La electrólisis salina es un principio simple similar al comportamiento del mar y su ecosistema: El agua de la piscina está ligeramente salada (9 veces menos que el agua del mar). Mediante la electrólisis, a través de la célula de cloración, la sal se transforma en hipoclorito de sodio, un potente desinfectante que se disuelve instantáneamente en el agua. El hipoclorito de sodio destruye todos los microorganismos en la célula y aporta al vaso de la piscina un nivel correcto de cloro libre. El cloro activo que se elimina bajo el efecto de los rayos ultravioleta, se renueva constantemente através de la célula de cloración sin que sea necesaria ninguna intervención.
Ventajas de la electrólisis salina agua siempre clara y agradable: El sistema realiza toda la desinfección e impide el desarrollo de las algas automáticamente. Desinfectante generado directamente en la célula de cloración. Es inodoro, no irrita los ojos ni reseca la piel. Podrá ausentarse varias semanas con total tranquilidad y encontrará la piscina tal como la había dejado.